Las gallinas de la Casa del Molí
Las gallinas de la Casa del Molí ocuparan el espacio de esta segunda entrada en nuestro blog.
Hace casi dos meses que conviven con nosotros en el jardín de la Casa del Molí un par de jóvenes huéspedes plumíferos.
Ambas gallinas son de razas diferentes aunque los nombres que les hemos puesto no lo son tanto. Queca y Quica son nuestras estimadas gallinas y os las presentamos a continuación:
La Queca, con un plumaje azul grisáceo majestuoso, es la gallina de más edad y la más glotona, en definitiva la jefa del gallinero. Queca es de la raza blue HF, una raza híbrida que consigue aunar un plumaje que no deja indiferente junto con una alta rusticidad y una excelente producción de huevos. El plumaje va des del azul ceniza hasta el azul con trazas negras y no deja indiferente, rompiendo el estereotipo que las gallinas ponedoras son las de plumaje más vulgar. Queca nos obsequia des de hace un mes con un huevo diario, que hace a primeras horas de la mañana. Es una gallina algo arisca pues no le gusta que la manoseen pero siempre es la primera en salir del gallinero a ver qué se le ofrece. Queca es una gran insectívora y no deja escapar la ocasión cuando puede saciarse con gusanos o tijeretas que merodean el gallinero o que le traemos nosotros mismos.
La segunda de abordo es la Quica. Quica es de la raza Sussex, originaria de Reino Unido. Gozan de buena resistencia a los fríos inviernos y son bastante robustas. Tal es así que aún siendo de edad más temprana que Queca, Quica ya tiene más envergadura. Quica tiene el plumaje blanco en gran parte, excepto algunas plumas de la cola y la base del cuello que aparecen en negro. En los demás aspectos Quica es totalmente opuesta a la otra. Quica se deja coger fácilmente sin zarandear sus alas, come de nuestra mano de forma gentil sin notar la picotada, no come insectos y… aún no pone huevos, aunque esperamos que pronto se destape, pues ya tiene la cresta prácticamente formada.
Las gallinas de la Casa del Molí son alimentadas con grano especialmente nutritivo para ponedoras. Lo complementamos con algunos insectos así como con restos de vegetales que antes desechábamos en la fracción orgánica.
Querido lector cerramos este blog animándote a venir a conocer nuestra casa y su entorno. Por experiencia con varios de los últimos huéspedes que nos han visitado os aseguramos que a los más pequeños les encantará ir a primera hora de la mañana a recoger el huevo, darles de comer en la mano, etc.
Y siendo Semana Santa,… ¿Qué mejor manera de pasar el rato con los niños que decorar uno de los huevos de las gallinas de la Casa del Molí?